Los vaivenes de los mercados emergentes

A pesar del gran impacto que tuvo la crisis financiera de 2008, el número de millonarios en dólares  superó los 16 millones de personas, un incremento de casi el doble con respecto al 2008. Este aumento ha tenido lugar fundamentalmente en los ricos países árabes como en los asiáticos. Por ejemplo, en China, el número de millonarios ha crecido en un solo año en un 60% – hasta 2,4 millones de individuos. Este tirón en la demanda de los más ricos ha hecho que las grandes compañías del sector de lujo como Richemont SA o su rival LVMH hayan crecido tanto. Las cotizaciones de sus acciones han crecido un 375 y un 327 % en el periodo analizado.

Rusia es otro de los países donde el sector de lujo se ha desarrollado muy positivamente a lo largo de los últimos años. Sin embargo la caída del precio del petróleo, las sanciones recibidas por su actuación en Ucrania, han tenido consecuencias muy negativas para el rublo y su economía en general.

A este respecto indicar que los productos de Cartier se han visto incrementados en un 50 % en las tiendas rusas, como ya habíamos explicado refiriéndonos a otros productos de lujo. Cartier es parte del conglomerado suizo Richemont SA que  posee varias de las principales empresas del mundo en el campo de productos de lujo, con fortalezas particulares en joyería, relojes de lujo y artículos de escritura.

Sus líneas de negocio abarcan varios de los nombres más prestigiosos (Maisons que se gestionan de manera independiente) de la industria del lujo incluyen a parte de Cartier, Van Cleef & Arpels, Piaget, Vacheron Constantin, Jaeger-LeCoultre, IWC, Panerai y Montblanc. Con respecto al mercado asiático es claro que para Richemont, China se está convirtiendo en uno de los mayores consumidores de sus productos de lujo, debido al rápido aumento del número de personas ricas en el país y al creciente interés de la nueva clase afluente asiática por la ropa cara, joyas, etc. Es más que probable que  el mercado de bienes de lujo en China crezca en un promedio del 20% en los próximos cinco años y esto es sin incluir el también creciente valor de las compras de consumidores asiáticos efectuadas en Occidente.

La dependencia de Asia para  las corporaciones más grandes en la industria está creciendo rápidamente: en la mitad del presente año, el 38 % de los ingresos de Richemont correspondieron a países de Asia, (excluido Japón), mientras que en 2002 la cifra era de sólo el 16%. Mientras tanto, China sigue siendo el mercado de mayor crecimiento en el sector de bienes de lujo. La saturación de los mercados europeos y americanos ya es muy alta y el aumento de los resultados financieros de los conglomerados más grandes de la industria vienen de la mano de los países asiáticos emergentes.

Se estima que dentro de 10 años la participación de los países en desarrollo en el consumo de bienes de lujo alcanzará el 50%, en relación con los cuales las empresas deberían aumentar la inversión en la región y ampliar las redes de ventas.

Sin embargo, los grandes conglomerados de lujo están pasando por algunas dificultades en los mercados emergentes en los últimos meses. Fuentes de Richemont SA indicaron que tras un pequeño declive en el mercado chino ya se está moderando tras la estancada demanda asiática de bienes de lujo provocó una caída en sus ganancias del primer semestre. Las ventas en China cayeron un 4 por ciento en los seis meses hasta septiembre, en comparación con una disminución del 10 por ciento el año pasado, según indicó Gary Saage en un encuentro con periodistas. El beneficio operativo se redujo un 4 por ciento a 1,31 millones de euros ($ 1,6 mil millones, «Nos hemos visto bastante afectados por los problemas acaecidos en China y las protestas de Hong Kong»).

Los comentarios de Richemont pueden ser los primeros signos de que los efectos de la campaña de China contra los gastos extravagantes de altos funcionarios  están disminuyendo desde que comenzó en 2012, a la vez que se observa un  consumo de Asia más débil debido a las protestas pro-democracia en Hong Kong. Las ventas del primer semestre de Richemont aumentaron un 4 por ciento excluyendo tipo de cambio y luego disminuyeron 1 por ciento en octubre en medio de las manifestaciones de Hong Kong.

En la primera mitad del ejercicio los ingresos de la rama de joyería aumentaron un 10 por ciento, mientras que las ventas de relojes disminuyeron un 1 por ciento. Excluyendo efectos de diferencia de cambio, los ingresos procedentes de Asia-Pacífico se mantuvieron sin cambios, siendo la primera vez que no creció en cinco años.

Los manifestantes en Hong Kong, donde los chinos ricos compran relojes y joyas para evitar los impuestos de lujo de China continental, bloquearon las calles y tiendas obligándoles a cerrar en septiembre y octubre. Las protestas pro-democracia coincidieron con uno de los momentos de mayor actividad comercial del año, las vacaciones del Día Nacional de China conocido como la Semana Dorada.

Richemont dijo que está implementando una congelación de la contratación y está tomando medidas para reducir costes, lo que afecta fundamentalmente a algunas  marcas de relojes suizos, por ejemplo Piaget. Sin embargo Richemont no planea realizar ajustes laborales en Cartier dado que la marca se esta mostrando «bastante resistente» a los problemas del mercado chino, indicó su director financiero en un encuentro con la prensa.

La compañía indicó que tendrá una ganancia de capital de 226 millones de euros en la segunda mitad  del año después de la venta de bienes inmuebles en la Quinta Avenida de Nueva York por $700 millones. Richemont compró dichos activos dos años antes por $375 millones.

Richemont, que aumentó su dividendo un 40 por ciento el año pasado, tiene previsto seguir aumentandlo cada año, ayudado por su posición de efectivo, indicó Gary  Saage. El cash-flow neto generado aumentó un 11 por ciento hasta €4.280 millones (un 12 % de su capitalización bursátil) a finales de septiembre. Los indicadores de liquidez de la compañía están por encima de los de sus competidores y además muestra un PER más atractivo (23,3 veces  frente a 27) que la media de su sector. La acción de Richemont SA cotiza con una leve caída (0,43 %) con respecto al valor hace un año, en lo que es una ligera mejor tendencia que otros de sus competidores como LVMH.

Hace unas semanas hubo rumores, desmentidos por el propio Gary Saage, que indicarían el deseo de vender Net-A-Porter, gigante del comercio electrónico que había sido adquirido por el grupo Richemont en 2010. Estos rumores, según algunos analistas, habrían empujado el valor al alza en las últimas semanas.

La crisis en Hong Kong «tendrá cierto impacto en los resultados trimestrales”, indicó Saage. «Ya hemos notado algún efecto negativo sobre la actividad en las tiendas libres de impuestos en el tercer trimestre». Por último es destacable que los consumidores más afluentes continúan comprando bienes de lujo muy caros, pero prefieren hacerlo, cada vez más durante sus vacaciones, en países alejados de China.

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