Dejad que Las Niñas estudien

“No importa dónde vivan. Sean quienes sean, todas las niñas en este planeta tienen valor”. El presidente de Estados Unidos y la primera dama anunciaban así la ampliación de la iniciativa Let Girls Learn, para romper la barrera que impide el acceso a la educación a millones de niñas en todo el mundo. La Casa Blanca se une así a los esfuerzos de Naciones Unidas por el derecho a la educación y el empoderamiento de mujeres y niñas desde la escolarización.

La administración estadounidense completa programas ya existentes de varias agencias gubernamentales y refuerza la agenda de ayudas, para que niñas de todo el mundo puedan superar los obstáculos de distinta naturaleza que impiden su educación. “Una buena educación puede elevarte de los orígenes más humildes, hacia una vida que jamás podrías haber imaginado”, aseguraba Michelle Obama. “Me veo a mi misma en esas niñas. Veo a mis hijas. Y quiero usar mi tiempo y plataforma como primera dama para lograr un impacto real”.

Las mujeres y las niñas son las más débiles en cualquier situación de injusticia política, social, económica, humanitaria, bélica. El 70% de los que viven en extrema pobreza en todo el mundo son mujeres y niñas. Y la educación puede cambiar estas cifras. Y las de sus comunidades. Unos 62 millones de niñas y adolescentes en todo el mundo no pueden ir a la escuela.

Tienen menos oportunidades económicas y son más vulnerables al SIDA, matrimonio infantil o forzado y otras formas de violencia. “Pero cuando una niña recibe una educación de calidad, entonces tiene más posibilidades de ganarse la vida razonablemente, formar una familia sana y educada, y mejorar la calidad de vida de los suyos y de su comunidad”, explica la Casa Blanca, recordando que la educación secundaria está directamente relacionada con las tasas más bajas de mortalidad infantil y materna, natalidad, y SIDA.

La primera dama asumirá la agenda de la Casa Blanca en este ámbito, junto al Peace Corps, el cuerpo de paz, la agencia federal independiente de los Estados Unidos dedicada a “promover la paz y amistad mundial”. Durante el primer año, Let Girls Learn se implementará en once países del mundo, con programas enfocados en la educación, empoderamiento, liderazgo, salud, nutrición, prevención de la violencia de género y de los matrimonios infantiles y forzados.

Se suman a los esfuerzos también la agencia de cooperación estadounidense USAID y otras alianzas con organizaciones privadas. Y cuentan con el apoyo de infinidad de personalidades del mundo de la política, música, cine estadounidense. Michelle Obama visitará en marzo dos de esos países, Japón y Camboya, “para subrayar la importancia que ambos países otorgan a la educación de las niñas y profundizar en la cooperación bilateral a través de programas de desarrollo”.

Los Obama dan así un importante impulso a la educación global de las niñas. Un asunto que no debe dejarse de lado en las agendas políticas del mundo. Y una responsabilidad que recae en todos nosotros. “Como padre de dos jóvenes fabulosas y extraordinarias”, concluyó Barack Obama querer asegurarse de que “a ninguna niña se le niega la oportunidad de ser una mujer fuerte y capaz”.