Cómo lograr que tu hijo tenga una boca sana
Te contamos cuáles son los errores más frecuentes que cometemos a la hora de cuidar los dientes de los más pequeños de la casa.
Los niños son los más propensos a sufrir caries porque comen más a menudo, demasiados alimentos ricos en azúcares dulces, golosinas y refrescos y aún no saben cepillarse correctamente bien los dientes. ¿Qué puedes hacer para prevenir la aparición de caries y otras posibles afecciones? Aquí os dejamos una lista de los errores más frecuentes que debes evitar.
No llevar a tu hijo al dentista a los 3 años. Es conveniente llevar al niño al especialista a partir de esta edad, ya que es cuando se puede intervenir en los malos hábitos que tenga el pequeño, así como evaluar el estado de las piezas y maxilar para prevenir posibles complicaciones bucodentales. Además, es recomendable acudir a la consulta en caso de caries, ante cualquier golpe en la boca, cuando un diente se rompa, si un diente definitivo se golpea o si sus mandíbulas no engranan al morder.
Alimentos poco saludables. Es necesario incluir de 2 a 3 porciones de lácteos al día, con el fin de cubrir el requerimiento de calcio y vitamina D, dos nutrientes importantes para la formación de dientes sanos. Es importante incluir diariamente cereales, frutas, vegetales, proteínas y grasas saludables. Pero se debe evitar, en la medida de lo posible, todos los alimentos con alto contenido en azúcares, se asentarán en las ranuras de los dientes y crearán caries. El alto consumo de azúcares no solo afecta a la salud dental de los niños, sino que aumenta el riesgo de sobrepeso y diabetes, entre otras enfermedades.
No usar flúor. El flúor es un mineral que ayuda a prevenir las caries, estando presente en dentífricos, enjuagues bucales, chicles, pero también en alimentos como el pescado y el agua. Hasta que el niño cumple 1 ó 2 años puedes aplicar una pequeña cantidad y hacerlo cada 4 ó 6 meses. De aquí hasta los 6 años es mejor utilizar una pasta de dientes infantil ya que contiene menos flúor. Usa una cantidad similar al tamaño de un guisante. A partir de los 6, ya puede utilizar pasta dentífrica de adultos y una cantidad de 1 a 2 cm sobre el cepillo.
Dejar que los niños se cepillen solos. La mayoría de los niños no tienen las habilidades motoras suficientes para cepillar sus dientes con eficacia hasta que tienen 8 años. Debes supervisar y comprobar que la superficie de cada diente está limpia. Intenta mantener el cepillo en un ángulo de 45 grados y ayúdale a frotar alternativamente la parte interior y exterior haciendo movimientos tanto desde la encía hacia abajo y circulares en cada uno de los dientes. No olvides enseñar a los niños a cuidar su higiene bucal. Es fundamental para garantizarles una sonrisa saludable desde que son pequeños.