¿Eso se puede operar? ¿En serio?

Cuando hablamos de intervenciones de cirugía plástica, generalmente pensamos en las intervenciones de pecho, la rinoplastia, la liposucción, la abdominoplastia, los liftings faciales… pero el campo de la cirugía estética abarca otras muchas intervenciones que, pese a ser menos conocidas, también tienen su demanda en muchos pacientes. Con este artículo queremos presentar algunos de estos tratamientos.

Liposucción de tobillos. Muchas mujeres están recurriendo a los cirujanos para acabar con los cúmulos de grasa localizados en los tobillos que provocan que la pierna pierda su forma y sus proporciones. Pero, ¿es buena idea realizar una intervención en una zona tan delicada como ésta? La operación es factible siempre y cuando se realice de manera meticulosa, ya que la piel del tobillo es muy tensa y el espacio para introducir las cánulas para la extracción de grasa o tejido adiposo es reducido.

Además, en el tobillo hay gran cantidad de nervios y vasos sanguíneos que si se manipulan sin precaución pueden provocar inflamaciones prolongadas. La liposucción en los tobillos permite recuperar la esbeltez de la pierna, eso sí, la paciente debe tener claro que la recuperación es lenta -entre dos y tres meses- durante los cuales hay que llevar calcetines o medias de presoterapia que se utilizan para prevenir la retención de líquidos.

Rellenos dérmicos en los pies. El uso de de los tacones durante horas y horas puede ser agotador. Por ello, en los últimos tiempos está aumentando el número de mujeres que recurren a materiales de relleno para dotar a sus pies de un poco de amortiguación adicional. Los rellenos dérmicos en los pies están al alza en ciudades como Nueva York, donde los zapatos de tacón alto son parte de la cultura.

Por lo general, los rellenos se inyectan en la yema del dedo gordo, en los metatarsos o en el talón, generando unas almohadillas artificiales que permiten amortiguar la incomodidad de los tacones. Son tratamientos bastante experimentales que aún no tienen el recorrido necesario como para certificar al 100% su fiabilidad. Hay casos de pacientes que han sufrido deformaciones en sus pies, artritis… tras el uso de este procedimiento. Desde nuestra clínica especializada recomendamos a compra de unas plantillas de gel como solución a este problema.

Cirugía del ombligo. Se trata de una cirugía plástica que se encarga de modificar la forma, el tamaño, la altura y/o la ubicación del ombligo. Las personas pueden necesitar esta intervención tras una abdominoplastia o una liposucción, pero también hay pacientes que optan por ella por diversos motivos:

• Por motivos estéticos
• Para restaurar su apariencia por haber llevado piercings
• Tras un embarazo
• Debido a cambios bruscos en el peso

Cirugía íntima de la mujer: Labioplastia. Es un proceso quirúrgico que se engloba dentro de las llamadas cirugías estéticas íntimas femeninas. Tiene como objetivo la reducción y la armonización del tamaño y la forma de los labios menores vaginales, sin que haya pérdida de sensibilidad en la zona, con una cicatriz totalmente invisible. Por lo general, la intervención más común es la reducción de los labios menores, los cuales, producto del paso del tiempo, partos o por razones congénitas, se presentan excesivamente grandes, colgantes o asimétricos, siendo visibles al sobresalir respecto a los labios mayores.

Este trastorno no sólo implica una cuestión estética, sino que interfiere en la vida diaria de las pacientes, en su higiene, al utilizar ropa o bikinis ajustados, al practicar deportes o durante las relaciones sexuales, produciendo incomodidad y dolor. Lo más habitual es que la paciente busque reducir el tamaño y grosor de sus labios inferiores, con el objetivo de que no sobresalgan respecto a los labios mayores.

El procedimiento consiste en la retirada del exceso de tejido que produce la hipertrofia de los labios y la eliminación de la piel sobrante de los mismos. Se trata de una sencilla intervención en la que se utiliza anestesia local con una mínima sedación. Es una operación que se lleva a cabo de forma ambulatoria, con una duración de una media hora y, tras la cual, la paciente puede volver a su casa. Tras dos semanas los puntos de sutura empleados en la intervención caen de forma natural. No se recomienda mantener relaciones sexuales hasta haber pasado, como mínimo, un mes.

Sonrisa permanente. Corea del Sur ha sido durante mucho tiempo uno de los pioneros en todo lo relacionado con las intervenciones de cirugía plástica. Una de sus últimas novedades es una técnica que se conoce como Smile Lipt y que consiste en esculpir una sonrisa permanente e imborrable en la cara de los pacientes. El procedimiento es sencillo, el cirujano realiza pequeños cortes en las comisuras de los labios para elevarlos hacia arriba. Es una operación muy demandada por personas que presentan flacidez en la boca o asimetrías. Los medios no han tardado en calificarla como «la intervención de la felicidad eterna».

Hoyuelos artificiales. La conocida como Dimpleplasty es una cirugía mínimamente invasiva que se utiliza para crear hoyuelos en las mejillas o en el mentón. El cirujano realiza pequeños cortes en el interior de la mejilla -en el caso de los hoyuelos en la barbilla los cortes se realizan a través de la parte interior del labio inferior- y posteriormente le da a cada una de ellos un par de puntos para generar un hoyuelo de aspecto natural en la piel que lo recubre. La cirugía suele durar 30 minutos, se puede realizar bajo anestesia local y no deja cicatriz en la parte exterior de la cara.