Chocolate suizo con mayúsculas

Desde sus inicios ya desarrollaban recetas únicas impulsadas por su selección minuciosa de materias primas e ingredientes de la más alta calidad, culminando en creaciones exquisitas que hacen las delicias tanto de grandes como pequeños. Un periplo culinario que comenzó en 1879 en la pequeña fábrica de Rodophe Lindt, el chocolatero más famoso de la época. Allí se perfeccionó una técnica con la que se producía un chocolate superior al resto y que permitía además la elaboración de tabletas.

Durante más de 150 años, los fabricantes de chocolate en Suiza y en el resto del mundo han tratado de descubrir el secreto que hay detrás de su receta. Nadie lo ha logrado hasta el momento. Su producto no es solo un símbolo de chocolate suizo de renombre mundial, sino también un símbolo de innovación y éxito de este país del corazón de Europa. Sus inicios en bolsa no fueron un camino de rosas.

Tras debutar a 296 francos suizos en el parqué en octubre de 1989, dos años después había perdido un 40% de su valor. Sin embargo, desde esos mínimos hasta ahora sus acciones se han revalorizado de media un 13,8% anual, por lo que ahora sus títulos cuestan nada menos que 5.670 francos suizos cada uno.

La firma ha anunciado recientemente un cambio importante en su cúpula directiva. Ernst Tanner, el que fuera consejero delegado durante 22 años, pasará a presidir el grupo y encargarse de la visión estratégica. Su cargo lo ocupará el director financiero Dieter Weisskopf. Bajo el mandato de Tanner la compañía desbancó a Nestlé como tercera mayor compañía de chocolates en EEUU por detrás de Mars y Hershey. Esto fue posible gracias a la compra en 2014 de la firma Russell Stover. Tras esta, Estados Unidos pasó a suponer más del 43% de los ingresos de la compañía, solo superada por Europa, de donde proceden el 45% de las ventas.

Aprovechando la caída de las divisas emergentes, la empresa ha puesto sus miras en mercados con mucho potencial como Brasil y Rusia. Por lo tanto, su asignatura pendiente sigue siendo Asia. Tras incrementar sus ventas globales un 7,1% durante 2015, la empresa se ha puesto como objetivo para este año crecer entre un 6% y un 8%. Solo con semejantes objetivos se explica que sus acciones coticen tan altas en bolsa.

Y es que su carácter exclusivo también le hace ser la empresa de alimentación que cotiza más cara en relación al beneficio que genera, por encima de otras firmas europeas como Nestlé, Danone, Diageo o AB Inbev. En base a esta circunstancia y a la subida del franco suizo en los mercados financieros, nos mostramos cautos con este valor. Si quiere seguir subiendo en bolsa deberá mostrar una mejora de sus márgenes y ejecutar a la perfección sus planes de expansión internacional.

Análisis: Felipe López-Gálvez. Disclosure: Self Bank es el banco digital pensado para aquellos que entienden el mundo de manera digital. Ofrece una experiencia de cliente diferente y servicios de valor añadido para que sus clientes puedan gestionar sus finanzas a su manera de un modo fácil e intuitivo, a través de cualquier canal digital. Con su lema “Hazlo a tu manera”, el banco busca empoderar a los clientes para que comiencen a tomar el control de la gestión de su dinero y les ofrece la independencia necesaria para que lo hagan del modo que ellos deseen. Self Bank es un banco digital español  participado por  Boursorama, la filial on line del grupo Société Générale  y uno de los principales actores en banca digital de Europa. Con más de 15 años de historia, el banco digital ofrece una amplia variedad de productos y servicios de ahorro y de inversión como cuentas nómina, tarjetas, cuentas de ahorro, Bolsa, CFDs o más de 1800 fondos de inversión.