Destinos de otoño con peques

Además del incentivo de las suaves temperaturas, el otoño revoluciona el paisaje con sus colores imposibles, olores intensos y sabores auténticos. Es una estación que me encanta y llega cargada de actividades para hacer vayas donde vayas, invitando a participar a toda la familia. Por eso te recomiendo siete planes para que disfrutes del otoño con los niños. En el campo, la montaña, cerca del mar, en contacto con animales o en un parque temático, mayores y pequeños lo pasaréis en grande.

1.- El Chorro de Navafría (Segovia). 
En la vertiente segoviana de la Sierra de Guadarrama, a unos 2 km de la localidad de Navafría, descubriréis un paraje natural que se vuelve espectacular en otoño: El Chorro de Navafría. Dejando el coche en el parque recreativo El Chorro, podéis disfrutar de un relajado paseo entre frondosos pinos que os llevará a la cascada, situada a más de 1.300 metros de altitud y con un salto de 20 metros de altura. Antes o después del sendero, podéis descansar en el parque recreativo, con mesas, restaurante y zona de juego para niños. El alojamiento idóneo para este plan es el Hotel Spa Manantial del Chorro, en Navafría.

2.- El castillo de Uncastillo (Zaragoza). 
Jugar a ser el rey del castillo es una de las diversiones favoritas de los más pequeños y al mismo tiempo da la oportunidad de hacer una escapada a zonas de interés cultural, como Uncastillo, en el Prepirineo aragonés. A los niños les encantará visitar su fortaleza de la mano Jesús, su famoso guía que explica como nadie la historia y detalles de este monumento. El resto del pueblo no se queda atrás, declarado conjunto histórico-artístico, destacando sus seis iglesias románicas. Una experiencia que se completa en los Apartamentos Uncastillo, un alojamiento familiar con todo lo necesario para facilitaros la vida cuando viajáis con peques. Además Miguel e Inma, sus propietarios son los mejores guías de esta zona y  os contarán todas las opciones para realizar turismo activo.  

3.- Montar a caballo en el campo manchego (Toledo).
El contacto con los animales también llama la atención de los niños. ¿Qué tal si montáis a caballo? El Hotel Villa Nazules, situado en la carretera de Almonacid a Chueca (Toledo) cuenta con un club hípico con excelentes instalaciones, donde iniciarse en el mundo del caballo y practicar la equitación en sus distintas modalidades. En este paraje poblado de olivos y con vistas a los Montes de Toledo recibiréis clases personalizadas, que harán las delicias de los peques. Además de los caballos, los niños podrán divertirse en los espacios pensados para ellos en el hotel, como la sala biblioteca o zona de columpios. Nazulkids también tiene en cuenta la comida, con desayuno y buffet especialmente para los niños, así como menús infantiles.

4.- Parque temático de Dinópolis (Teruel).
También podéis aprovechar para visitar un parque temático, ideal para que los niños se diviertan y aprendan cosas nuevas. Nuestra propuesta es Territorio Dinópolis, en Teruel, un parque paleontológico-lúdico que les enseñará cómo surgieron y cómo era la vida de los dinosaurios. No faltan las recreaciones de estos animales prehistóricos, vídeos en 3D y juegos didácticos.

Un plan que se puede combinar con la visita a la ciudad de Teruel y a pueblos con encanto de la provincia, como Albarracín, Rubielos de Mora o Peñarroya de Tastavins. A la hora de descansar, La Casa de Los Moyas, una encantadora casa de alquiler completo o La Posada de Mosqueruela, un hotel con habitaciones familiares pero con mucho estilo.

5.- Turismo activo en Vizcaya.
Si tenéis pensado escaparos al País Vasco, os recomendamos el entorno montañoso y costero de la cuenca del Lea-Artibai, en Vizcaya. Aquí se levanta el Antsotegi Hotela, en un valle próximo a la localidad de Etxebarría. Ocupa una antigua herrería del siglo XV reconvertida en hotel rural familiar que cuenta con una empresa de turismo activo y de aventura donde disfrutar de tirolinas, escalada e incluso de una vía ferrata. Y para comer, en el restaurante de este hotelito ¡hay pizzas para todos! Es imposible que los niños se aburran con ésta y otras actividades, además de la oferta natural y cultural que ofrece el entorno, como senderismo, torres, monasterios… La costa está a 20 minutos y las localidades de Bilbao y San Sebastián a 45 minutos.

6.- Tren cremallera de Núria (Girona)
Otra opción es descubrir algunos rincones del Pirineo Catalán durante la estancia en La Casassa de Ribes, una masía catalana situada en Ribes de Freser (El Ripollés), con posibilidad de alojarse en alguno de sus apartamentos o alquilar toda la casa, con todas las comodidades para alojarse en familia. Aunque se pueden realizar numerosas actividades, la visita estrella y que divierte mucho a los niños es el viaje en tren cremallera desde Ribes de Freser al santuario y estación de esquí del Valle de Núria, donde existe, además, un parque lúdico para pasar una jornada inolvidable con los peques.

7.- Aguas termales para toda la familia (Pontevedra)
Un plan estupendo disfrutar de los beneficios de las aguas termales en familia. En Cuntis, Pontevedra se sitúa un famoso balneario de aguas mineromedicinales, donde los más pequeños podrán bañarse y jugar gracias a sus 1.700 metros cuadrados de instalaciones con un circuito lúdico-termal donde no falta una piscina estupenda climatizada para no pasar frío, pasillo de contracorriente, chorros subacuáticos y mucho más. Para alojaros en el mismo Cuntis, se encuentra A Pedreira una casa de la selección Rusticae con un jardín inmenso que en otoño está más bonito que nunca, y donde los peques podrán correr y disfrutar al aire libre.