Amazon ya tiene su supermercado (real)

La multinacional ha abierto su primera tienda en Seattle en la que compras online y recoges en persona.

Amazon se pasa al ladrillo. En el sentido medio estricto. Acaba de inaugurar su primera tienda para recoger la «cesta de la compra». Es decir que tú compras a través de la web pero vas al supermercado a recoger los ultramarinos y la comida que has adquirido. Segunda idea puesta en marcha por el gigante mundial de la distribución para combinar el ‘online’ y el ‘offline’ y testar el comportamiento de sus clientes. De momento, el supermercado físico solo está abierto para los empleados de Amazon, que se ahorran los 15 dólares que cuesta el envío a casa del pedido online, a lo que hay que sumar la propina.

Amazon está combinando con éxito el online con el offline

El sector de la alimentación en Estados Unidos mueve la friolera de 800.000 millones de dólares al año, la enorme mayoría se sigue haciendo en los supermercados de cercanías o convenientes, pero cada vez es mayor el crecimiento de la compra de alimentos online. Grandes plataformas que distribuyen y venden a través de sus webs los productos orgánicos, por ejemplo, de las granjas del estado de Nueva York, es ejemplo de desarrollo espectacular de esta tendencia.

Amazon revoluciona el mundo del supermercado

Se trata de la segunda innovación de la compañía que preside Jeff Bezos en los últimos cuatro meses para acercarse al mercado de la alimentación «de otra manera». De hecho, su primera experiencia tiene que ver con el supermercado en el que no se paga, sin cajeros, del que hablamos en esta misma sección hace unos meses. Un extraordinario dispositivo inteligente que permite a los compradores elegir los alimentos y directamente irse a casa porque sus tarjetas tienen un chip que, al retirar de la estantería el producto elegido, se carga directamente en la tarjeta de crédito.

Disclosure: El medio no se responsabiliza sobre las opiniones expuestas en el artículo. El texto ha sido escrito de manera libre expresando ideas propias, sin recibir ninguna compensación por ello. El autor no tiene ninguna relación de negocios con cualquiera de las empresas cuyas acciones se mencionan en este artículo. 

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