La glamurosa foto oficial de Melania…
... y otros retratos históricos de las primeras damas de Estados Unidos.
El retrato oficial de la nueva primera dama, Melania Trump, está dando mucho que hablar. El tono y tratamiento de la fotografía la acerca más a una imagen de editorial de moda que a un documento del archivo histórico de Estados Unidos. Y las redes sociales se han hecho eco de ello sin esperar ni un segundo, subrayando lo que más llama la atención de esta foto de la primera dama: el anillo de compromiso con un inmenso diamante en el dedo anular y los presuntos filtros, retoques o airbrushing facial.
Vestida con una chaqueta negra anudada al cuello, Melania Trump opta una vez más por un look sobrio, elegante y monocolor, como viene haciendo desde que llegó a la Casa Blanca. La composición de la foto, el gesto y su postura recuerdan a primer golpe de vista a otro famoso retrato oficial: el de Nancy Reagan, esposa del presidente Ronald Reagan, hoy venerado por los republicanos en Washington.
La fotografía fue tomada en el West Sitting Hall de la residencia privada de la Casa Blanca por el fotógrafo de cabecera de los Trump, Regine Mahaux, autor de aquel reportaje visual de la familia en su ático chapado en oro en el centro de Manhattan y con vistas a Central Park.
Su predecesora en el cargo, Michelle Obama, optó por el Salón Azul para su primera fotografía oficial, tomada por Joyce N. Boghosian. Generó entonces una intensa polémica por llevar los brazos al descubierto, rompiendo con las tradicionales composturas de los retratos presidenciales. La atacaron quienes pensaban que era una ruptura de protocolo imperdonable y la alabaron quienes subrayaban que el elegante vestido negro sin mangas solo dejaba al descubierto los brazos perfectamente esculpidos de una primera dama que hizo de la vida saludable y el deporte el emblema de sus ocho años en la Casa Blanca.
Para su segundo retrato, Michelle Obama optó por un vestido negro también, pero esta vez con mangas tres cuartos. Y sin olvidar las perlas al cuello, convertidas en un emblema de su estilo. La fotografía, tomada por Chuck Kennedy en el Salón Verde en 2013, fue toda una sorpresa, por el cambio de look de la primera dama con flequillo, que ella misma atribuyó entre risas a una leve “crisis de mediana edad».
Lo cierto es que la polémica sobre las imágenes de las primeras damas siempre ha estado presente. Una de las mayores fue tras la presentación del retrato de Jackie Kennedy, tras el asesinato del presidente. La pintura con una primera dama de mirada distraída entre una nebulosa difuminada dio mucho que hablar entonces, por el componente de irrealidad que desprendía. Pero hoy es una de las más buscadas en esta galería de primeras damas de Estados Unidos de la Asociación Histórica de la Casa Blanca, donde pueden comparar el ayer y hoy de la historia presidencial.